EL EADiCAL. No se desgast«n las naciones, cual algunos piensan, sino que siempre el explendor maróha adelante y sin descanso, como los astros que g-iran eternamente cumpliendo la le.y que les sujeta ai encadenamieiito universal. No creemos en \& vteja Kuropá, porque es moderna en la historiado la naturaleza que no reconoce principio. Por tanto, negamos e?as íiñrmaciones que pretenden "hacernos {:oricebir nuestro atraso, en parangón con anteriores egidas, que si pudieron ser más ricas, eran más infelices, puesto que llo^ban su nombre mezclado al de tiranía Que tenemos con que nuestras armas ■victoriosas recorrieran la Italia y que triunfaran en Pavía. en-S. Quintín y un Lepante y que ei sol iluminase ctVirtiii na mente la bandera de Castilla, si el fanatismo estúpido de aquella edad, guerras sangrientas y preminencias señoriales cercenaban Tidas y convertían :al pueblo en máquina de. sus ambiciones y en escala de sus privilegios, y' si áqüél'os territorios no eran de los españoles, sino del rey absoluto quo á su capricho disponía de ello*, Somos más grandes que lo pasado y desechamos con convicción esas ideas retrobadas que algunos manifiestan, más que por creencia, por aquello que no se quien dijo, de «Elogiar á los mü«/tos por ódio á los vivos y golpear á los hijos con los huesos de sus padres.» Y si como afirmábamos la Europa no se desquicia, sino que antes bien ha de seguir á la civilización; impn scindiblemente necesita camUa'r lo vetusto por lo moderno, derrocarlo antiguo y acatar lo nuevo. lié aquí nuestia urgencia; la reforpia. Hambre donde la naturaleza brinda en-, gvandecimiento y saineda.i, motines ocasionadí'S por las arbitrariedades, fraudes cometidos por una administración que no pone frenó a la codicia gubernamental, gorarquías peligrosas en el campo de la igualdad, sor, desengaños que abren los ojos á la nación, que reclama su soberanía como base de un Estado próspero y tranquilo. Portugal y España sienten la latina san-gro por sus venas, ven el mismo cielo, respiran los mismos' aires y son Un só'q pueb o: Iberia. Hay por tanto simpatías y comunidad de ideas que han de formar la confederación. ¿Hay en fin causas poderosísimas y necesarias de cambiar de régimen, porque España llega á la estación de su estío y tiene que sustituir el antiguo ropaje de su invierno per el que ordena el tiempo, y ha}' que (icRterrar al caciquismo, que la infama y á los gobiernos que piensan detenerla y á las instituciones que la s'ubyugan y á los hombres que 'a corrompen Esta es pues la elaboración de ;a humanidad al terminar el siglo XIX; dejar herencias gloriosas al venidero y prepararle frutos de grandeva. Asi es que los políticos eminentes, buscan mndelo de organización puesto que una idea por filantrópica y en cantadora que aparezen no siempre cuadra con la práctica, S'endo por consiguiente rm'joi' imitar de la realidad y copiar una constitución, corrigiendo sus defectos, que el inventarla. Sentada esta premisa, toca ahora, íiallar esa consiitución salvadora que nos encumbre, esa canción que nos salve. Recibimos la civilización del Oriente y aventajamos al maestro, so la hicimos conocer al Occidente y el Occidente nos ha superado: hé aquí en dos palabras la condensación de muchos siglos. , Hoy por lo tanto, no cabe discusión y tras las brisas del Atlántico se encuentra el modelo. Decimos lo que Guichnt «aprended de ln America.» Si querémos ser libres, aspiramos á la perfecta soberanía nacional, imitemos al Nuevo Mundo y entonces llegará la hora que decía Chasiebeuf cuando eX' lama: «Se verá aparecer un siglo nuevo: siglo de admiración paralas almas vulgares, de sorpresa'y de espanto para los tiran-es y de libertad para toda.la tierrav» . F. 0. Requisitorias. El Juez de instrucción del distrito del Sa grario de esta canital llama al procesado Francisco Donaire López natural de ügíjar y vecino de Granada para que comparezca en el término de 20 dias á fin de que tenga efecto la práctica de cierU diligencia en causa que contra el mismo y consortes se instruyo por ei delito de disparo de arma de fuego y lesiones. —El de Guadix cita al testigo D. Angel Almendros Carmona para que eVel plazo de cinco días se presente á prestar declaración en la causa que se sigue contra- el alcalde de Charches por el delito de desobediencia. A pagar. El cobro del primer trimestre de la contribución territorial é industrial, tendrá efecto en Ugijar los días i al 3 de Septiem bre. y el 1 y 2 en Sal eres'; Pitres, Pinos R^y Pampanéira. Niguelas, Dúrcal, Cozvijar, Cónchar, Chile y Talará, Capileira, Béznar, Bayacas, Acequias, Montillana, Campotéjar, Dehesas de Güadix, La Calahorra, Beas de Guadix, Alamedilla, Freila, Lobras y Timar, Fregenite, Gójar y Albolote. Llamamiento. Por lá administración- de contribuciones de esta provincia se llama á D. Antonio María del Vallei agente ejecutivo que ha sido de Albuñol, para que se presento en aquella Dependencia coft objeto de notificarle una providencia dictada en expediente de alcance que se tramita. Cesante. Ha sido declarado cesante el peaión conductor de la correspondencia 'de Venta, de ¡a tuerta á Huéneja, Dólar y Fenéira,: Joaquín Berbel Izquierdo. Personal de correos. Se ha dispuesto por la Dirección genera! de coreos que el aspirante de la clase de segundos D. Nicas i ó Arroyo, que prestaba sus servicios en la administración principal de Toledo, pase a continuar los á la Estafeta de Santafé de esta provincia; sustituyéndolo en aquel punto D, Felipe Gutiérrez Angulo, aspirante de helase de primeros con destino en Santafé. Repartimiento Se enruen'tra terminado y expuesto al publico en Ttenalúa de las Villas, el reparto do ia contribución de inmuebles doP actúa! año económico. Edicto. Ei alcalde presidente del Exorno, ayuntamiento de esta capital, hace saber: Que no habiéndose presentado licitado res para las su bastas del impuesto sobre licencias de puestos públicos fuera de los Mercados, y el de emolumentos de la albóndiga de granos para el actuol ejercicio económico de 1890 á 91, la Exorna. ( orporación municipal en sesión celebrada el día ¡6 del corriente mes se sirvió acordar oir proposiciones ,para el arriendo de dichos arbitrios. En h-caile de Angulo núm 7, parece que habita una señora pupilera que, según un vecino de la misma casa tiene la costumbre de sacudir la alfombra á las diez del dia, poniendo lleno de polvo al que pa-a por abajo. Parece que dicho vecino se quejó al guardia municipal núm 14, el cual se deseiitondió diciendo que ese asunto era de la incumbencia del alcalde del barrio. Esperamos que el Sr. Alcalde hará cumplir con todo rigor el bando de buen gobierno, y amonestará á dicho agente y le hará saber su obligación, [La sesión del Ayuntamiento. Se abrió bajo h presidencia del Sr Duran Lerchundi y con asistencia de ocho concejides. Como si dijéramos, en familia. Eran estos los señores Gómez (0. Joaquín y D Manuel), Ortega, Lindo, Gutiérrez, Ventuc, López Jordán y Amaro. Después fueron entrando en el salón los señores Cañadas, Ortiz Pujazón, Sedeño, Sánchez Reina, Caro y López Rogés. ■ Leyóse el acta de la anterior que fué aprobada después de una aclaración del señor Ventué, Informe de la comisión de ornato para que se aatorice al Alcalde para reparar el -camino de la Ronda. Asi se acordó. Instancias: De la señora Gibantes, desechada. D. José Pérez Nieto, que se le imponga uua multa por haber ejecutado ciertas obras sin previa autorización. D, Cipriano López, aprobada.. « Emilio Calvadle, id. « Antonio Guilién, id « Francisco JirnAnez Arévalo, id. : Comisario de Guerra, id 0. Manuel Bueno, id. | D. Abelardo Martínez, como presidente ; del Liceo id. Delincación del postigo de la calle de Hi: n ojosa. Delinoación de la calle de Sancti Espi- i rituv- ñl ffñioñ eíiiu i ú i - ;■■ ■• Colocación de aparatos para cortinas en la fachada del café Suizo. Que pase á informe del arquitecto uiunicipal. Varias inclusiones en el padrón. Instancia de los vecinos de la calle de la Trinidad Qno pase 3 iníortrio del arquitecto. La comisión encargada de inspeccionar el estado en que se encuentran los caminos vecinales los ha encontrado muy mal y propom- se destine una cantidad en el presupuesto á este objeto Expedientes de pobreza. Limpieza de darros y otras obras. Pliego de condiciones para el servicio del alcantarillado. Distribución de fondos para ei presente mes. El A caldo propuso que siguiera la plantilla con arreglo al presupuesto anterior. Esta es Ja segunda vez que se acuerda lo mismO( Y estamos en el segundo mes del año económico. Se acordó que se pagara á los temporeros del presupuesto de acequias. ¡Tantas cosas se habrán pagado de él! D. Francisco Reyes pide se le levante la fianza en compensación á las cantidades que le adeuda el municipio Se acordó que pasara á la comisión de Hacienda. Concluyó el despacho ordinario. El Sr , Linde propone que se regularicen las sesiones de las comisiones, dedicando á cada una ios dias siguientes- Lunes, hacienda y alumbrado. Martes, üementerios. Miércoles, ornato. Jueves, aguss Viernes, abastos. Sábados, cabildos. Asi se acordó. El Sr. López Jordán pide que se -surta de aguas potables á los vecinos de la Quinta Alegre, haciendo las obras necesarias con toda urgencia. ,E1 Alcalde contestó que estaba el expediente á informe del arquitecto. El Sr. Ortiz Pujazón propone se eleve una exposición al ministro do Fomento para que se active el expediente formado sobre nulidad de venta do la torre de las Damas. El Sr. Caro Riaño propuso se dirigiera un telegrama al gobierno pidiendo que' se declare esta torre monumento nacional El cabildo aprobó las dos proposiciones. A propuesta de) Sr Caro se acordó pasar una comunicación á los presidentes d.» las juntas parroquiales de sanidad, para qué en el término do ocho dias presenten las estadísticas rectificadas. : 1 El Sr, Jordán indicó la necesidad de cumplir los acuerdos del municipio sobre las obras del Matadero y principalmente los que se refieren á la sala de oreo. Hubo necesidad de repetirle el acuerdo al Alcalde. El Sr. Ortiz manifestó la necesidad que hay de surtir al matadero de aguas limpias, á lo que contestó el Alcalde que no hacían falta porque las carnes no se lavan. Los Sres. Ortiz y Jordán respondieron á su vez al Alcalde que eran necesarias para el servicio del establecimiento, para lavax Lis carnes alguna vez y sobre todo para limpiar los despojos que el público también consume El Sr Ventué pidió que se bajara el precio de las carnes para ¡o qu j podía establecer e¡ munioipio nna tabla reguladora. Se levantó la sesión. Fallecimiento, Ayer á las dos cU la madrugada falleció en el Hospital Remedios Pérez Martín de 28 añes, natural de Pinar de Moral a, y que como recordarán nuestros lectores, se quemó 164 LA MANO NEGRA. ALVAREZ DURAN. 165 168 LA MANO NEGRA. proa lemiendn que se snsoiUra 1103 /eyerla en que el triunfo fuese casi tan funesto como la den ota, eYllaban cnidadosamente que las mujeres tratasen de pasar á popa; La desgraciada viuda vela á su hija á, pocos paso df ella, sin poder hablarla; sin saber cual habla sbio su sueileen la uoclie falal qne h.vb;a precedido. Angela también es aba privada de comunicar C' n su madre. La noche al tender su oscuro velo, mitigó aquella amargura El mar, Uanquilo hasla entónces,, empezó á picai se. En un espuife pUno co^io lo es una balsa, se hacía muy difícil manejar él remo con una mar bravia. Por fortuna el viento Ikgaba de pfa. Pero las olas bañiban á cada instan e ta cubierta y las provisiones se ponían dif^iimenle a! abrigo bajo una sencilla lona. Para poder sostenerse en la ondulante tabla, lanía María que rodear su brazo 4 la cintura de Pablo, el cual con su capote de marino la alirigabi á ella y al niño, á qoien su madre no lograba acallar. Domingo, el honrado y fuerte Domingo, sostenía y también abrigaba á la tierna doncella. Aquella mujer tan delicada, tan elegante, de formas seductoras, de manos tan bien hechas, de piés tan pequeños, de cutis lan b anco y delicado, se apoyaba confiada en los robustos hombros de un homdre que en lugar de decirle como otros habían hecho á proa «Sé la victima,» le habia dieho la, noche antedor. ('Descansa, niña, yó vela'é po- tí...» Y él sin desear más que verla satisfecha, no se a revia- ni aun á moveise por no moleslaila. Poco después de elevarse el sol. sobre el horizonte, se d'jó ver un punto oscuro háo.ia el Sud-e^te. Pnblo eogió presuroso un anteojo. Del mismo modo que cuando divisó al Tomeraiio, asi miraba Mcia un punto da- Domingo también cogiA el catalejo. =¿Qué te parece? preguntó Pablo al contramaea- m ■■ ■ r - ■■■ ■ . . ,., ! í =Sin duda, respondió éste, avistamos tierra y esa lie ra es la isla de ílalti. =Muchaehos, mandó el capitán, fuerza de renr, ayudad á la vela, ántes de que vuelva á oscurecer atracaremos en la arenosa playa. Remaron los marineros con el deseo de lomar tierra y con l-.mor de que cambiase el viento. Esforzándose de tal sner e que aun, no habla medíado el día, cuando e! fondo de la balsa tocó en U archa de un playaso que eü^ñ-ron para el desembarque. Salió al mar un marinero, llegábale el agoa hasta medio mns'o. L!evó un an:oiey lo sujetó á un remo que enclavó de punl;i en la arena de la playa desierta. Dr'sde que se aproximaron á tomar tierra, la viuda de Uiloa pasó á.popa^ y ahrazóá su hija eslreohándole amorosamente contra su pecho con abundamos lágrimas de dolor y de ternura. humedecido los cebos. Tienes tu machete: sigúeme, comblirpmos cuerpo á cuerpo, r^Como gustes. Domingo queriendo dar loda garantía a! carpintero que sin embargo no mostraba desnonfimza ni temor, se acercó á Pablo y le entregó sus pistolas. = Espórame) le dijo. ¿Dónde vas? =Espera, le repito: volverá uno de los dos, —repuso señalando al Temerario. =Procura pues volv(!r,=es3lamó, dando un fuerte apretón de mano á su amigo. Domi go costeando la playa empezó á andar. —¿Dónden van?— preguntó á Pablo un ma riñere. — E- que vuelva nos lo contará, — respondió éste, L s marineros lo comprendieron, pero como Pablo no so movía, ellos se quedaron también. Siguiendo siempre la costa, llegaron el conl-'amaesUe y 6! carpintero á una elevación algo 'listante qui formaba una explanada. Ei suelo era allí más firma que la arenosa p'aya. Se parar n, desenvainaron los cuchillos. Poniéndose uno frente del otro, se mi' aron como dos alaaos ingleses adíesli ados en la lucha. Domingo, apesar de lo pesada que parecía su traza, sallaba como un tigre, Acosa a) carpintero que, apéfias puede valerse contra él, á . pesar de ser suelto y ágil»