LA OPINION ñas de primera comunión, Colegios de Termens y Escolapias, Asociaciones piadosas, Adoración Nocturna, con bandera; Cofradía del Santísimo Sacramento, con su Junta, portando el báculo el hermano mayor honorario Excmo. Sr. D. José Solís Ruiz, quien va ante la custodia acompañado por los miembros de la Directiva D. Emilio Jiménez Varo, D. José Garrido Moreno y D. Manuel González Lara. El trono de la rica custodia, portadora de S. D. M., había sido finamente adornado con claveles blancos. Daban escolta de honor, cuatro guardias de la Benemérita, con uniforme de gala. La presidencia eclesiástica la ocupaba el párroco de la Asunción don Manuel Osuna Bujalance, y en las esquinas del paso, revistidos con casulla, acompañaban al Santísimo los Rvdos Sres D. José Burgos Serrano, D. Diego Villarejo Pérez,, D. Gregorio Molina Hidalgo y D. Antonio Cano Povedano. Con roquete, fueron los Rvdos. Sres. D. David Rodríguez Hidalgo y D. Francisco Ramírez Chamizo. Formaban parte del Cortejo numerosas personas con velas y la presidencia oficial estaba integrada por el alcalde accidental, D. Francisco Piedra Pastor; Juez de Instrucción D. Francisco Morales Morales; director del Instituto, D. José Diez García; juez comarcal, D. Manuel Entrena Santaella; teniente de la Guardia Civil, D. Miguel Gallego Contreras; director accidental del Taller-Escuela Sindical de Formación Profesional, D. Francisco Marín Albornoz, Corporación Municipal y Consejo del Movimiento. Tras de detenerse en los sitios de costumbre, la custodia entró en la iglesia, mientras la notas del Himno Nacional, que ejecutaba la Banda, se confundían con los repiques jubilosos de las campanas de la torre del templo arciprestal, donde se remató la jornada eucarística, dándose la bendición con el Santísimo. Queremos destacar que la Banda de Música, que interpretó escogidas piezas de su repertorio, alguna de las cuales se debe a la inspiración de su director, ha ganado mucho con la incorporación de los elementos juveniles. RECITAL DE PIANO FLAMENCO, POR EL CONCERTISTA JOSE ROMERO En el salón de actos de la casa sindical, el pianista José Romero, ha dado el recital de piano que se había anunciado bajo el patrocinio del Centro Filarmónico Egabrense. El pianita orsasunense, interpretó con gran ejecución, no exenta de buen gusto, el programa de su original «Granaina», «Fandangos de Huelva», «Zorongo», «Seguirillas», «Soleares», «El Vito», «Malagueñas» «Romances», i, 2, 3, de la Suit «Romances y Leyendas» y «Petenera». Como extra interpretó magistralmente el trémolo de Trrega «Recuerdos de la Alhambra», que fue muy aplaudido como todo el programa. El público salió muy satisfecho del concierto, que estuvo integrado por obras con música basada en el folklore tradicional andaluz, que José Romero, un tocaor de piano flamenco, ha armonizado con buen arte. A la salida del templo, D. José Solís, recibió de nuevo la muestras de afecto de que fue objeto a su llegada, patentizándose una vez más el cariño que se le profesa en esta tierra suya y nuestra. Su bella esposa, acompañada por las señoras de Gómez de Aranda y de Mora Mazorriaga, presenció el paso de la procesión desde varios balcones. Cerca de las nueve, emprendió el ilustre matrimonio viaje a Estepona, siendo despedido cariñosamente por las personas que acudieron a la casa con tal fin y por los que transitaban por la calle de Juan Ulloa, que se congregaron junto al coche para decirles adiós con expresivos testimonios de simpatía. Los hermanos mayores de la Cofradía de la Patrona, al reiterar su gratitud a los señores de Solís por el importante donativo que recientemente han enviado para las obras del Santuario, les invitaron a pasar un día al lado de la Divina Serrana en la casita blanca, habiéndoles prometido que en fecha próxima subirán con sus hijos a postrarse a las plantas de la Virgen de la Sierra. JUAN DE AVILA . - El pasado -31 de mayo Su Santidad Pablo VI presidía en el Vaticano la canonización del beato Juan de Avila, mientras que las campanas del orbe católico lo anunciaban con sus más alegres repiques. Nos llena de gozo este magno acontecimiento, por católico y poi español, y también por haber coincidido la canonización en el domingo siguiente de la festividad del Corpus Christi, ya que el patrono del clero español tenía especialísima devoción al Santísimo Sacramento. Juan de Avila, quien por humildad renunció al capelo cardenalicio, vivió los tiempos inciertos de un pos Concilio, teniendo que luchar con los avatares de aquellas corrientes tempestuosas, hasta que el transcurrir de los días hizo renacer la calma, haciéndose la fe más robusta. El Apóstol de Andalucía sube a los altares en otro pos Concilio. La Iglesia de nuestros días, como en los que le tocó vivir aquí en la tierra a Juan de Avila, está azotada por algunas corrientes equivocadas a las directrices de Roma. La Barca de Pedro, en su caminar seguro, atraviesa una borrasca que no le hará zozobrar porque cuenta con Cristo, pero que hace sufrir al Papa quien reiteradamente hace llamadas de atención a los errores que se manifiestan. Desde estas columnas nos unimos a la alegría de la cristiandad católica por esta nueva estrella que brilla en el santoral romano, al mismo tiempo que pedimos al Patrón del clero español interceda para que interpretándose fielmente las conclusiones del Vaticano II vivamos prácticamente en un solo rebaño, bajo un solo Pastor, las enseñanzas del Evangelio. Pedimos también aumente el número de vocaciones sacerdotales y que los ministros del Señor sean muchos y santos, porque las mies es mucha y los operarios pocos. M. G. Tú solo no puedes atender las necesidades de las demás; pero con Caritas, sí. Hazte socio de Caritas